Este domingo pasado hemos tenido el privilegio de andar por Ansó y alrededores, el que no haya querido venir que se joda, que no sabe lo que se pierde.
Se trataba de una andada circular con salida y llegada en Ansó pasando por Fago (si, el pueblo del acalde tiroteado) y visitando unas cuantas Ermitas de los dos pueblos. Paisajes de acojonar y un entorno de película de gnomos, hayedos, pinares y bosque cerrado con todo tipo de especies, choca principalmente el Boj que tanto consumimos en Tauste pa Marzo, lo hay sin conocimiento.
La verdad es lo que me comentaba ayer MSC, pondrías un "barraco" al frente de la oficina de turismo de cualquier lugar del Pirineo y daría igual, no hace falta promocionarlo porque se vende solo.
Como Ansó está lejos y no nos apetecía darnos el madrugón fuimos el sábado y nos alojamos en el Hostal Aisa que está en la plaza del Ayuntamiento, muy recomendable, lo regentan hijo, madre y abuela (abuelisma, muy mayor, pero curra que no veas). Para decir la verdad el hijo es un poco "sopo" pero las señoras cubren muy bien este defecto.
Fuimos a Ansó por un recorrido que yo nunca habia hecho pero Retor ya conocía, tras pasar Sos nos desviamos a la derecha (en vez de ir a Sangüesa) por Los pintanos, Navardún y todos esos pueblos de la margen izquierda del pantano de Yesa hasta cruzar el Aragón para llegar a Berdún.
De Berdún hasta Ansó hay veintitantos kilómetros de carretera pésima pero merece la pena ir aunque solo sea una vez porque vas recorriendo la Foz de Biniés, garganta del rio Veral que en algunos tramos sobrecoge.
Bueno, una vez instalados un par de cañitas y a esperar al resto de la expedición Taustana que estan alojados en Echo pero van a venir a pasar la tarde. Además por la tarde entre las siete y las nueve hay entrega de credenciales y regalos de la andada. Cuando hemos ido a por las credenciales una moza iba apuntando y decía el nombre de la gente, tocaba Ana Pelegay y dice gritando "A ver, Pelagay, donde está", y nosotros hemos dicho "coño que bien pronuncia el nombre en taustano esta moza".
A las nueve hora de cenar, Miguel Jr. ya empieza a pensar con el estómago y está contando los minutos, no hay que preocuparse que no se nos pasará la hora estando él al quite.
Cenando hemos conocido a Patxi y Señora, una pareja de Irún que viene de embadurnarse de barro en Tiermas con la intención de ver estos alrededores, son también senderistas pero nunca han hecho andadas programadas como ésta y han visto una buena forma de conocer el terreno.
Tomando café en el bar también hemos conocido al alcalde de Ansó, un tio mu majo con el que hemos hablado de las relaciones pastoriles-comerciales entre Tauste y Ansó. Dice que existen en Ansó documentos auténticos del año 1500 (y pico) que reflejan transacciones entre Ganaderos de Ansó y la Casa de Ganaderos de Tauste.
Entre otras cosas también le ha quitado importancia a la dureza de la andada diciendo que no era muy larga y con solo cuatrocientos metros de desnivel. Queremos pensar que como él es ganadero estará acostumbrado a pastorear por estos montes y le parecerá que esto es poca cosa pero os puedo asegurar que la andadica no era un paseo precisamente y de 400 metros nada, acumulados son muchos mas y si no aquí tenéis el perfil que marca mi querido GPS, ese que tanto le gusta a Retor y del que pa no perder la costumbre ha vuelto a mofarse, yo sigo creyendo que es envidia cochina. Hay un trozo que en el gráfico sale vertical, eso si que es un error debido creo a llevar el aparato envuelto en la mochila, el altimetro se lía, el error es desde el inicio hasta este tramo, luego lo he sacado y ya parece que ha ido bien.
Ocho de la mañana, 3 grados bajo cero, concentración en la plaza del Ayuntamiento pa desayunar y dar credenciales a los que faltaban.
El primer tramo del recorrido ha sido de unos dos kilometros por senderos todo cuesta arriba hasta la Ermita de la Virgen de Puyeta, en este punto el recorrido corto era simplemente volverse por donde habías venido y tomar tramos finales del recorrido largo. Este trozo era ya algo duro y por eso excepto Ana y Juan todos los de Tauste se han vuelto porque andaban acompañados de las chicas pequeñas y el resto no era ya terreno para ellas.
Al lado de la Ermita hay una especie de refugio donde nos dan el primer avituallamiento, prácticamente todos los avituallamientos han sido iguales, fruta, frutos secos, chocolate, zumos vino, agua y una especie de "nestea" de otra marca. En la foto de abajo podemos ver las vistas desde la Ermita.
Continuamos ya sin descanso hasta el punto mas alto de la andada, sin comerlo ni beberlo nos espera uno de los tramos mas jodidos de los que me ha tocado hacer a mi, Retor tiene razón, seguramente el Moncayo desde el refugio es mas suave que esto. En esta subida es donde ya podemos confirmar lo que desde hace un tiempo es evidente, Miguel Jr. está como un caballo, ya no hay forma de seguirlo cuesta arriba y lo único que he podido hacer es gritarle que estuviese atento a las marcas para no salirse del sendero, en el último tramo ha podido hasta con Patxi (que no veas como sube) y hasta en el zizagueo del camino trepaba al derecho para adelantar gente.
Una vez arriba ves todo, incluido nuestro amigo el Bisaurín que hoy se encuentra totalmente despejado. Nos hacemos las fotos obligadas.
Estos son los vascos.
A partir de aquí la cosa es un sube y baja hasta Fago o mas bién hasta una Ermita en un cabezo encima del pueblo en la que tenemos el penúltimo avituallamiento.
Todavía queda un repecho bastante fuerte en el que ya empiezas a encontrarte parados a algunos de los que han salido de estampida a primera hora. El engaño de pensar que era un paseo suave creo yo que ha hecho a mucha gente salir a tope y lo pagan ahora. Al terminar la subida hay un pequeño avituallamiento regentado por un mozo puramente montañes (barba, rastas y ropa al uso) que maldice porque pasa la gente de largo ó solo pilla agua "Comeros algún platáno, ¡mecagüen sos!".
Comenzamos a bajar ya sin paradas, nos dicen que es todo para abajo hasta Ansó y empezamos padre e hijo a atacar. Un repaso de fisio y unos pequeños consejos para antes de echar a andar parece que han obrado milagros y no me molestan los tobillos ni las rodillas, empezamos casi a correr pasando a tol mundo por unos parajes y senderos espectaculares.
Según Miguel hemos llegado casi de los primeros, yo no lo sé porque me he dado tal paliza pa seguir el ritmo que una vez en Ansó no sabía ni donde estaba, me ha costado cerca de una hora recuperarme, ni con la ducha volvía en mi.
A partir de las 13:30 nos esperan migas con setas y de todo a la brasa en el frontón de Ansó, en la brasa volvemos a ver al alcalde de fogonero, "aquí hay que hacer a todo" dice.
Las migas estan cojonudas, pierdo la cuenta de las que se come Patxi que al no estar muy acostumbrado a este plato se desquita pa lo que le queda hasta que las vuelva a comer. Miguel Jr. en su línea habitual devora to lo que le ponen "vale mas pagarle un viaje a Australia" dice Patxi con su acento característico.
Os pongo una pequeña selección de fotos de la comida.
Hay mas fotos, Goyo concretamente casi funde la cámara, incluso creo que a la vuelta le hicieron una a Patxi embadurnao de barro en Tiermas (porque se volvió a Tiermas), si me las pasan haré un añadido.
Para terminar decir la currada que se han tenido que pegar los ansotanos para preparar esta marcha, los senderos se veían desbrozados recientemente, casi todo el recorrido estaba repasado y no es moco de pavo quitar broza por esas laderas, os lo digo yo que llevo toda la vida esbrozando.